Por ello, hoy nos queremos centrar en una cuestión que plantea muchas dudas a las pacientes que acuden a nuestras clínicas de fertilidad: ¿se puede ser madre a los 45 años con óvulos propios? A continuación, te ofrecemos todas las respuestas sobre el tema.
Ser madre a los 45 años con óvulos propios: ¿es posible?
Las posibilidades de ser madre a los 45 años con óvulos propios son muy bajas, incluso con la ayuda de tratamientos de fecundación in vitro (FIV). Esto se debe a que a esa edad, tanto la reserva ovárica (cantidad de óvulos que tiene una mujer) como la calidad de dichos óvulos son muy bajas. De hecho, es muy habitual que a los 45 años las mujeres hayan agotado su reserva ovárica y se encuentren en la menopausia. En otros casos, están muy cerca de ella y ya han comenzado los desajustes menstruales propios de dicha etapa.
La reducción en la cantidad y calidad de los óvulos disminuye las posibilidades de que alguno de ellos sea fecundado por el espermatozoide. Además, una vez producida la fecundación, existe un mayor riesgo de anomalías cromosómicas en los embriones. Estas alteraciones pueden, entre otras cosas, impedir la implantación embrionaria y provocar abortos espontáneos en las primeras fases del embarazo.
Probabilidades de ser madre a los 45 años con óvulos propios
Como ya hemos adelantado, las probabilidades de ser madre a los 45 años con óvulos propios son muy bajas, especialmente si la mujer intenta conseguir un embarazo natural. Por ello, la inmensa mayoría de las mujeres que desean tener descendencia a esa edad recurren a un tratamiento de fecundación in vitro.
Sin embargo, la eficacia de estas técnicas también disminuye con la edad, como consecuencia de la reducción en la cantidad y la calidad de los óvulos. Por ello, las estadísticas que manejamos las clínicas de reproducción asistida reflejan unas tasas de éxito muy bajas a partir de los 45 años.
De hecho, las mujeres que comienzan su tratamiento de fecundación in vitro a los 45 años tienen un 5% de probabilidades de conseguir un embarazo en el primer ciclo de fecundación in vitro. Tras tres intentos de FIV, el porcentaje llega al 8% aproximadamente. Por tanto, si atendemos a las cifras, las probabilidades de ser madre a los 45 años con óvulos propios son muy escasas.
Tratamiento de fertilidad para ser madre a los 45 años: ovodonación
Normalmente, la primera opción de las mujeres que desean ser madres a los 45 años es recurrir a un tratamiento de fecundación in vitro, usando sus propios óvulos. Sin embargo, esta posibilidad se suele descartar tras varios intentos, o por indicación del propio especialista en reproducción asistida.
Normalmente, esto último se decide tras valorar el resultado de diferentes exámenes médicos que indican una escasa presencia de óvulos (recuento de folículos antrales, prueba de la hormona antimulleriana, etc.). En otras ocasiones, el especialista descarta utilizar óvulos propios cuando, tras la punción folicular, detecta que la calidad de los mismos es muy baja, lo que impide crear embriones de calidad (con posibilidades de implantación, sin anomalías cromosómicas…).
En resumen, cuando el uso de óvulos propios no es viable o tiene unas probabilidades de éxito muy bajas se suele recurrir a la donación de óvulos, también llamada ovodonación. Este tratamiento es una variante de la fecundación in vitro, pero implica utilizar los óvulos de una donante joven y sana, lo cual aumenta significativamente las probabilidades de lograr un embarazo que llegue a término con éxito.
La donación de óvulos es un proceso estrictamente regulado en España, por lo que cuenta con todas las garantías legales y protege el anonimato tanto de la donante como de la receptora (madre del bebé a todos los efectos). Además, la donante de óvulos debe someterse a complejos y exhaustivos controles médicos y psicológicos, para garantizar la ausencia de problemas genéticos o emocionales, entre otros.
Además, la donante se elige en un extenso banco de óvulos y de acuerdo a las características de la mujer receptora y de su pareja, en el caso de que la tenga. Para ello, se tienen en cuenta aspectos tanto físicos (color de ojos, cabello y piel; raza; altura…) como médicos (grupo sanguíneo…).
Dicho todo lo anterior, cabe señalar que, en un primer momento, la ovodonación es un tratamiento que suele generar cierto grado de rechazo en las mujeres. Y es que, por lo general, las futuras madres desean que su bebé comparta su carga genética.
Sin embargo, hoy en día, debido al retraso en la edad de la maternidad, la ovodonación es un tratamiento en clara tendencia ascendente, por lo que es una técnica cada vez más asimilada. Además, existe un término, el de la epigenética, que es desconocido por la inmensa mayoría de las mujeres que recurren a la donación de óvulos.
Este concepto explica por qué los niños nacidos por ovodonación se parecen a sus madres. Por ello, además de ser muy interesante, resulta tranquilizador para las mujeres que recurren a la ovodonación para cumplir su sueño de tener hijos.
Si deseas ser madre a los 45 años, te invitamos a que acudas a una primera consulta gratuita en nuestras clínicas de fertilidad. Los médicos especializados en reproducción asistida te orientarán sobre tus probabilidades reales, pero estimadas, de conseguir un embarazo con óvulos propios.
En caso de que haya que descartar esta posibilidad, te orientarán sobre los pasos a seguir para comenzar un tratamiento de ovodonación. Asimismo, resolverán todas tus inquietudes y, si lo necesitas, te tranquilizarán con su experiencia. Recuerda que, cada día, tratamos a numerosas mujeres inmersas en tratamientos de fecundación in vitro con donación de óvulos.