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Sin embargo, también hay una gran cantidad de ocasiones en las que el hombre presenta una baja calidad de esperma, lo que dificulta que la mujer se quede embarazada.
Por ello, en este artículo nos vamos a centrar en las principales pruebas de fertilidad que se realizan en los hombres. La más conocida es la del seminograma. Sin embargo, existen otras que detallaremos a continuación.
¿Cuándo debe hacerse una prueba de fertilidad?
Por lo general, las pruebas de fertilidad están indicadas en las parejas que llevan un año manteniendo relaciones sexuales regulares sin protección. Y, a pesar de ello, no consiguen un embarazo.
Sin embargo, si la mujer de la pareja tiene más de 35 años, es preferible adelantar las pruebas y recurrir a ellas cuando se llevan seis meses tratando de lograr la gestación.
Si este es tu caso, te recomendamos acudir a una clínica de fertilidad. Una vez en la consulta, los especialistas en reproducción asistida realizamos, a ambos miembros de la pareja, pruebas de fertilidad. De esta manera, podremos llegar al origen del problema y, lo que es más importante, encontrar una solución para conseguir el embarazo.
Tipos de pruebas de fertilidad masculina
En concreto, las principales pruebas de fertilidad masculina son las siguientes:
1- Historia clínica
La elaboración de la historia clínica es lo primero que se hace en un hombre que acude a una clínica de fertilidad porque no puede tener hijos.
Para elaborar dicha historia, el médico realiza una serie de preguntas al varón relacionadas con sus antecedentes familiares, enfermedades e infecciones previas y cirugías en su aparato reproductor.
Asimismo, el especialista indagará sobre determinados hábitos del paciente (alcohol, tabaco y drogas), el consumo de medicamentos y la exposición a radiación o cualquier otro producto tóxico.
Cualquier detalle relacionado con estos aspectos puede interferir en su capacidad reproductiva. Por ello, toda la información aportada resulta de gran utilidad al médico para empezar a determinar si la infertilidad de la pareja tiene un origen masculino.
2- Exploración física
La siguiente prueba que se realiza es una exploración física en los genitales del hombre (pene y testículos). En dicho examen, el especialista podrá advertir problemas anatómicos, bultos, inflamaciones o cicatrices previas que hayan dado lugar a problemas de fertilidad.
Asimismo, la exploración física se puede complementar con una ecografía testicular. De esta manera, el médico podrá detectar malformaciones en los conductos deferentes (pequeños tubos que transportan los espermatozoides) o confirmar la existencia de un varicocele, el cual afecta a la producción de espermatozoides.
3- Seminograma
El seminograma, también llamado espermograma, suele ser la prueba clave para valorar la fertilidad masculina.
El seminograma es un estudio que sirve para determinar la calidad del semen del hombre. Para hacer dicha prueba, el varón tendrá que entregar una muestra de su semen tras haber estado entre 3 y 5 días sin eyacular.
En función de los parámetros que presente el semen, el médico podrá determinar si los espermatozoides son normales o padecen alteraciones.
4- Análisis hormonal
En caso de que se detecten alteraciones en el semen del hombre, se realizará un análisis hormonal para complementar el estudio de fertilidad. Dicho análisis hormonal consiste en una sencilla extracción de sangre.
Esta analítica ayudará al médico a entender por qué el semen presenta determinados parámetros fuera de los rangos de normalidad. Por ejemplo, puede suceder que el hombre presente una baja producción de testosterona debido a un problema hormonal.
Normalmente, estas son las pruebas de fertilidad masculina que se realizan en la mayoría de los casos. Sin embargo, hay ocasiones en las que con ellas no se consigue dar respuesta a los problemas del hombre para concebir. En estas situaciones, se recurre a exámenes más complejos y avanzados.
5- Estudio de fragmentación del ADN de los espermatozoides
Esta es una prueba de fertilidad masculina que permite detectar si el ADN espermático está dañado. Y es que, un alto grado de fragmentación dificulta la fecundación del óvulo e impide el desarrollo del embrión.
5- Cultivo de semen
El cultivo de semen, también llamado espermocultivo, es un análisis para detectar la presencia de microorganismos. Es decir, de infecciones.
El cultivo de semen no se realiza en todos los casos, sino cuando el seminograma detecta una alta presencia de leucocitos.
6- Estudio del cariotipo
El cariotipo es el conjunto de cromosomas de una persona. El hecho de que el varón presente alteraciones cromosómicas también puede comprometer su fertilidad.
El estudio del cariotipo se realiza a través de una analítica de sangre.
¿Cómo se hace la prueba de fertilidad en el hombre?
Las principales pruebas de fertilidad masculinas son muy sencillas y pueden realizarse todas el mismo día. Sin embargo, hay que tener en cuenta unos pequeños requisitos.
Si bien la historia clínica o la exploración física pueden llevarse a cabo en cualquier momento, no ocurre lo mismo con el seminograma o el análisis hormonal.
En lo que respecta al seminograma, el hombre deberá guardar entre 3 y 5 días de abstinencia. Por tanto, en este periodo de tiempo anterior a la prueba no puede mantener relaciones sexuales ni masturbarse.
Para realizar el seminograma, el hombre tendrá que acudir a la clínica de fertilidad. Allí, el equipo médico le entregará un recipiente estéril y le indicará la sala a la que debe dirigirse. Con la máxima privacidad, podrá masturbarse e introducir la muestra de semen en el recipiente
En función del criterio profesional, es posible que el hombre deba entregar una muestra de semen varios días o semanas después. Esto es, simplemente, por si las características del esperma varían de un día a otro.
En lo que respecta a la analítica hormonal, el varón simplemente deberá acudir en ayunas al centro, como ocurre en cualquier otra extracción de sangre.
¿Cuánto cuesta una prueba de fertilidad en hombres?
En la actualidad, el precio de una prueba de fertilidad masculina oscila entre los 100 y los 200 euros, aproximadamente. Sin embargo, hay que tener en cuenta que algunos varones presentan problemas de infertilidad complejos. Por ello, si se requieren pruebas avanzadas, el precio puede aumentar.
En cualquier caso, hoy en día las pruebas de fertilidad masculina detectan la inmensa mayoría de problemas para concebir. Una vez establecido que la ausencia de embarazo tiene su origen en el hombre, los médicos determinarán cuál es el tratamiento de reproducción asistida más adecuado para tener hijos.
No hay que olvidar que la edad de la mujer juega un papel fundamental en estos casos. Por tanto, cuanto antes se averigüe la causa del problema, más fácil resultará lograr el embarazo.