Passeig de la Bonanova 39
Colón de Larreátegui Kalea, 47

¿Cuáles son los síntomas en la betaespera? ¿Qué se debe hacer durante este periodo?

¿Cuáles son los síntomas en la betaespera?

Revisado por el Dr. Guillermo Gauthier

La betaespera es un plazo que la mayoría de nuestros pacientes viven con ciertas dosis de nerviosismo y ansiedad. Esto resulta comprensible, ya que son muchas las esperanzas que depositan en los tratamientos de fertilidad.

Índice

La betaespera es un plazo que la mayoría de nuestros pacientes viven con ciertas dosis de nerviosismo y ansiedad. Esto resulta comprensible, ya que son muchas las esperanzas que depositan en los tratamientos de fertilidad.

Por ello, es muy habitual que estén atentos a cualquier síntoma que pueda indicar la existencia de embarazo. Sin embargo, es fundamental tratar de mantener la calma para no convertir los días de la betaespera en un periodo angustioso.

Hoy hemos elaborado un artículo para todas aquellas personas que están inmersas en la betaespera, o que están a punto de llegar a esta fase de su tratamiento de reproducción asistida. Si este es tu caso, te recomendamos leer con atención el artículo. Te proporcionará consejos muy valiosos para sobrellevar la betaespera con serenidad.

¿Qué es la betaespera?

La betaespera es el plazo de tiempo que transcurre desde que termina el tratamiento de reproducción asistida hasta que se realiza la prueba de embarazo.

En el caso de la inseminación artificial, la betaespera comienza el día que se introduce el semen en el útero de la mujer. En cambio, en la fecundación in vitro, la betaespera se inicia el día de la transferencia embrionaria.

La betaespera debe su nombre, precisamente, a la hormona que se analiza en el test de embarazo: la beta-hCG. Esta es una hormona que, a medida que se desarrolla el feto, aumenta sus niveles en sangre. Y, por tanto, es un indicador de la gestación.

¿Cuánto dura la betaespera?

En el caso de las técnicas de inseminación artificial, la betaespera tiene una duración de 15 días. En cambio, en los tratamientos de fecundación in vitro, la betaespera dura entre 10 y 15 días, ya que depende de los días que tenga el embrión que se transfiere.

Por tanto, estos son los tiempos que hay que esperar desde que termina el tratamiento de reproducción asistida hasta que se realiza la prueba de embarazo.

Estos plazos de tiempo se deben a que a partir del día 8 ya es posible detectar el aumento de los niveles de hormona beta-hCG en sangre. Y, por ello, a partir de los días mencionados la prueba de embarazo puede ofrecer un resultado fiable. De hacer el test antes, nos podríamos encontrar con un falso negativo o positivo.

¿Cómo saber si estás embarazada en la betaespera?

En general, es muy complicado saber, durante la betaespera, si se ha conseguido un embarazo. Y es que, aunque un plazo de 10-15 días pueda suponer una eternidad para los pacientes, en realidad es insuficiente para experimentar signos inequívocos de gestación.

De hecho, en muchos casos, los síntomas que se pueden sentir en la betaespera están más relacionados con la medicación hormonal que se continúa administrando la mujer después de haber terminado el tratamiento.

Por tanto, durante la betaespera no se puede saber si la mujer se ha quedado embarazada. En consecuencia, es necesario esperar a hacer la prueba de embarazo.

Síntomas de la betaespera

Como hemos mencionado, los síntomas que presenta una mujer en la betaespera no son indicativos de haber conseguido la gestación. De hecho, también tenemos muchas pacientes que no manifiestan ninguna señal y, a pesar de ello, obtienen una prueba de embarazo positiva.

En cualquier caso, los síntomas más comunes de la betaespera son los siguientes:

  • Dolor e hinchazón en el abdomen: estas molestias suelen ser similares a las que se sufren con la ovulación o la menstruación. También pueden presentarse pinchazos en los ovarios.
  • Manchado o ligero sangrado.
  • Cambios en el flujo vaginal: puede volverse más abundante y adquirir un tono amarillo o, incluso, ser transparente.
  • Aumento en el tamaño de los pechos.
  • Náuseas.
  • Cansancio y sueño.
  • Ganas de orinar.
  • Estreñimiento.
  • Insomnio.
Síntomas de insomnio durante la betaespera

¿Qué hacer (y qué no hacer) durante la betaespera?

A continuación, vamos a ofrecer una serie de consejos para hacer la betaespera más llevadera:

  • Hacer una vida normal, pero evitando los grandes esfuerzos: durante la betaespera no es necesario solicitar una baja laboral o hacer reposo. Sin embargo, sí es importante evitar los grandes esfuerzos físicos, como realizar deportes de alto impacto o cargar con demasiado peso.
  • Seguir una alimentación saludable: los cambios en el tránsito intestinal son habituales debido a la medicación hormonal. Por ello, conviene tomar fibra, frutas y verduras para evitar el estreñimiento, así como beber agua para mantenerse hidratada.
  • Evitar el alcohol y el tabaco: dado que la mujer aún no sabe si se ha quedado embarazada es preferible, por precaución, evitar cualquier hábito nocivo para la salud.
  • No obsesionarse con los síntomas: esto es, posiblemente, lo más difícil de la betaespera. Hay que tener claro que ningún signo que se experimente durante esta fase es sinónimo de embarazo. Por tanto, no hay nada que la mujer pueda hacer para saber si se ha quedado embarazada.
  • Relajarse y mantenerse ocupada: cuanto más ocupada se encuentre la mujer o la pareja mejor podrá sobrellevar la betaespera. Por ello, este es un periodo ideal para hacer planes, recuperar aficiones y practicar deporte moderado. Y, por supuesto, para hacer ejercicios de relajación y respiración.
  • No centralizar las conversaciones: aunque puede resultar muy sano desahogarse y compartir los sentimientos, conviene no hacer de la betaespera el centro de atención. Hablar y pensar en exceso sobre el tratamiento de fertilidad aumentará la angustia, el estrés y la preocupación.
  • No buscar información en Internet: no hay ninguna información fiable que puedas encontrar en Internet que no te haya contado ya tu médico. La respuesta que necesitas solo la podrás saber en unos días. La búsqueda de información te creará más ansiedad y no resolverá tus dudas.
  • Prepararse para un resultado negativo: aunque sea importante encarar la betaespera con una actitud positiva, es fundamental no negar la realidad. Hay muchas personas que, aunque hoy en día tienen hijos, no lograron un embarazo en los primeros intentos de inseminación artificial o de fecundación in vitro.
  • Apoyar y respetar a la pareja: los tratamientos de reproducción asistida también suponen un desafío para las parejas. No todas las personas viven las situaciones de la misma manera y es fundamental tratar de comprender a la otra parte.
  • Pedir apoyo psicológico: aunque el plazo de tiempo sea corto, en 10-15 días se pueden presentar numerosos altibajos emocionales. Por ello, tenemos muchos pacientes que recurren a nuestro servicio psicológico para prepararse para la betaespera. Una sola consulta antes de iniciar este periodo puede aportar mucha claridad y confianza a los pacientes.

Por nuestra amplia trayectoria como especialistas en reproducción asistida sabemos lo largo y difícil que puede hacerse un periodo de, tan solo, 10-15 días. Sin embargo, también hemos comprobado lo útil que resulta seguir los consejos que te acabamos de dar.

Por ello, insistimos de nuevo en la idea que te hemos repetido a lo largo de este artículo: trata de relajarte y desconectar durante la betaespera porque no hay nada que puedas hacer para saber si te has quedado embarazada.

Ginecólogo y obstetra, especialista en reproducción asistida.

Guillermo Gauthier es ginecólogo del centro de fertilidad donde ejerce atendiendo a pacientes nacionales e internacionales. Es licenciado en Medicina y especialista en Ginecología y Obstetricia. Se especializó en Reproducción asistida realizando el Máster de Reproducción en el IVI/Universidad Rey Juan Carlos. 

Déjanos tus datos para que te llamemos o llámanos gratis al 900 72 33 74

"*" señala los campos obligatorios

Nombre y Apellido*
Telefono*
Este campo es un campo de validación y debe quedar sin cambios.