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¿Cómo mejorar la calidad del esperma?

Mejorar la calidad del esperma para tener hijos

Mantener una buena calidad de esperma es fundamental para concebir, ya sea de manera natural o mediante un tratamiento de reproducción asistida (fecundación in vitro o inseminación artificial). Por ello, es importante que los hombres que desean tener descendencia conozcan cómo mejorar la calidad de su esperma. Te adelantamos que muchos de los factores que influyen en la fertilidad masculina dependen, directamente, del estilo de vida.

¿Cómo se evalúa la calidad del esperma?

La principal prueba para evaluar la calidad del esperma es el seminograma. Este es un análisis que consiste en obtener una muestra de semen para, posteriormente, estudiar los espermatozoides. Los principales parámetros que se miden para evaluar la calidad seminal son los siguientes:

  • Cantidad de espermatozoides: hace referencia al volumen de espermatozoides presentes en el semen. Una baja concentración de espermatozoides (trastorno conocido como oligospermia) reduce las posibilidades de que alguno de ellos fecunde el óvulo.
  • Motilidad de los espermatozoides: se refiere a la capacidad de los espermatozoides para moverse de manera eficaz (hacia adelante, de manera progresiva). La movilidad es importante para que los espermatozoides puedan ascender por el tracto reproductivo femenino, llegar al óvulo y fecundarlo.
  • Morfología de los espermatozoides: las anomalías en la morfología de los espermatozoides -ya sea en su cabeza, cuello o cola- también pueden empeorar la calidad del semen. La alteración que hace referencia a los defectos en la anatomía de los espermatozoides es conocida como teratozoospermia.

Factores que influyen en la calidad del esperma

Los principales factores que influyen en la calidad del semen son los siguientes:

  • Edad: la calidad del esperma tiende a disminuir con la edad, especialmente después de los 40 años.
  • Alimentación.
  • Actividad física.
  • Obesidad.
  • Tabaco, alcohol y drogas.
  • Estrés.
  • Exposición a tóxicos y radiación.
  • Problemas médicos: el varicocele, las enfermedades de transmisión sexual (ETS), los trastornos hormonales o las enfermedades sistémicas (cáncer, diabetes…) influyen en la calidad del esperma.
  • Alteraciones genéticas: hay determinadas anomalías genéticas que pueden causar infertilidad. Por ejemplo: la fibrosis quística, el síndrome de Klinefelter o el síndrome de Kallman.
  • Calidad del sueño.
  • Temperatura de la zona testicular.
  • Traumatismos o cirugías previas en la zona genital.

Consejos para mejorar la calidad del esperma

A continuación, te vamos a ofrecer una serie de consejos para mejorar la calidad del esperma:

  • Mantener un peso saludable: el sobrepeso y la obesidad pueden afectar negativamente en la fertilidad masculina.
  • Seguir una dieta equilibrada: es recomendable apostar por una dieta mediterránea, en la que no falten la fruta, la verdura, los cereales integrales (arroz, quinoa…) y las proteínas magras (carne de pollo y pavo, pescado, huevo…). Los antioxidantes, como las vitaminas C y E (encontradas en brócoli, arándanos, zanahoria, tomate, uvas…) son esenciales para mejorar la calidad del esperma.
  • Hacer ejercicio regular: la actividad física mejora la circulación sanguínea y el bienestar general, lo que puede tener un efecto positivo en la capacidad reproductiva del hombre. Sin embargo, practicar deporte en exceso o levantar demasiado peso puede perjudicar la salud de los espermatozoides.
  • Evitar el tabaco y reducir el alcohol: tanto el tabaco como la ingesta excesiva de alcohol pueden disminuir tanto la cantidad como la calidad del esperma.
  • Evitar las drogas: el consumo de drogas (marihuana, cocaína…) impacta negativamente en la producción y la calidad de los espermatozoides.
  • Tratar de prevenir enfermedades de transmisión sexual: hay determinadas infecciones de transmisión sexual que pueden causar esterilidad en los hombres. Por ejemplo: la gonorrea y el VIH/SIDA. Para reducir el riesgo de contraer una ETS es fundamental utilizar el preservativo.
  • Gestionar el estrés: el estrés prolongado puede afectar a los niveles hormonales y, por consiguiente, alterar la producción de espermatozoides. Para tratar de controlar el estrés es recomendable practicar técnicas como la meditación, el yoga y la terapia psicológica. Asimismo, el deporte ayuda a liberar el estrés.
  • Descansar adecuadamente: la falta de descanso y los trastornos del sueño pueden alterar los niveles hormonales y, por tanto, empeorar la calidad del esperma. En el caso de los adultos, es recomendable tener, al menos, siete horas diarias de sueño reparador.
  • Controlar la temperatura escrotal: para mejorar la calidad del esperma también es recomendable controlar la temperatura de la zona testicular, ya que el calor excesivo puede dañar el ADN de los espermatozoides. Entre otras cosas, hay que evitar el exceso de baños calientes y saunas, llevar ropa demasiado ajustada y colocar el ordenador portátil sobre las piernas.
  • Limitar la exposición a tóxicos y radiación: para mejorar la salud reproductiva también es importante limitar la exposición a ciertos químicos y metales pesados (pesticidas, amianto, plomo…). En el caso de la radiación, es preferible no llevar el móvil en los bolsillos del pantalón (especialmente en los delanteros).
  • Consultar al médico la toma de cualquier suplemento: existen determinados suplementos alimenticios que contribuyen a mejorar la calidad del esperma (zinc, selenio, vitamina C…). Sin embargo, es fundamental que cualquier suplemento sea pautado por un médico.
  • Tratar cualquier condición que afecte a la fertilidad masculina: para tener una buena calidad de esperma es fundamental controlar cualquier problema médico que afecte a la salud de los espermatozoides (hipertensión, diabetes, desequilibrios hormonales que provocan bajos niveles de testosterona, etc.).

Dicho todo lo anterior, es importante destacar que la calidad del esperma puede estar determinada por una combinación de factores. Además, en algunos casos, la causa exacta de la baja calidad seminal puede ser difícil de determinar.

Por tanto, si tras poner en práctica los consejos anteriores para mejorar la calidad del esperma no se logra concebir de manera natural es recomendable consultar con un médico especializado en reproducción asistida.

¿Qué hacer ante una baja calidad de esperma?

Ante una baja calidad de esperma que no hace posible concebir de manera natural se puede recurrir a lo siguiente:

Cambios en el estilo de vida

Este es el primer paso para mejorar la calidad del esperma. Cuando se detecta una baja calidad seminal es imprescindible consultar con el especialista en fertilidad qué cambios se pueden introducir en los hábitos y el estilo de vida (alimentación, ejercicio, descanso, estrés, medicación…).

Tratamiento de fecundación in vitro

Cuando, a pesar de haber introducido cambios en el estilo de vida, no se logra el embarazo de manera natural, conviene recurrir a técnicas de fecundación in vitro. Con estos tratamientos se realiza una capacitación espermática, un proceso que permite mejorar la muestra de semen.

Para ello, se seleccionan los espermatozoides más adecuados (móviles, sin defectos en su morfología…), se lavan y purifican. Además, la capacitación espermática permite limpiar la muestra y retirar las células o sustancias tóxicas que pueden dañar los espermatozoides.

Donación de semen

La donación de semen es una técnica a la que se recurre cuando no resulta posible utilizar el esperma del hombre para conseguir un embarazo mediante fecundación in vitro. Por tanto, en estos casos se acudirá a un banco de semen para obtener una muestra óptima, acorde a las características de la pareja (color de ojos, cabello y piel; raza; altura; grupo sanguíneo…).

Esperamos que este artículo te haya ayudado a entender cómo mejorar la calidad del esperma. Como ves, existen métodos naturales y otros que requieren ayuda profesional. No obstante, cada caso debe tratarse de manera individual, por lo que si con los anteriores consejos no se logra el embarazo, se recomienda acudir al andrólogo para estudiar el caso y determinar qué tratamiento o pruebas deben realizarse.  En nuestros centros trabajamos conjuntamente ginecólogos y andrólogos para abordar los tratamientos de fertilidad de manera completa. Por ello, si lo deseas, te invitamos a solicitar tu primera consulta gratuita con nuestros médicos especializados.

Ginecólogo y obstetra, especialista en reproducción asistida.

Guillermo Gauthier es ginecólogo del centro de fertilidad donde ejerce atendiendo a pacientes nacionales e internacionales. Es licenciado en Medicina y especialista en Ginecología y Obstetricia. Se especializó en Reproducción asistida realizando el Máster de Reproducción en el IVI/Universidad Rey Juan Carlos. 

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