Cuando dos personas intentan concebir y el embarazo no llega, es fundamental realizar pruebas a ambos miembros de la pareja. En el caso del hombre, uno de los primeros pasos es analizar la calidad de su semen.
Entre los problemas que pueden detectarse en un seminograma está la necrozoospermia, una alteración que implica la presencia de un alto porcentaje de espermatozoides muertos en la eyaculación. Pero, ¿qué significa esto realmente y cómo puede afectar a la fertilidad? En este artículo te lo explicamos en detalle.
¿Qué es la necrozoospermia?
La necrozoospermia es una condición en la que más del 50% de los espermatozoides de una muestra de semen están muertos. Es un problema poco frecuente, pero cuando se presenta, puede ser un gran obstáculo para conseguir un embarazo de forma natural.
Es importante no confundir la necrozoospermia con otros trastornos como la teratozoospermia (alto volumen de espermatozoides con morfología anormal) o con la astenozoospermia (alta cantidad de espermatozoides con baja movilidad). En la necrozoospermia, los espermatozoides no solo son incapaces de moverse correctamente, sino que están completamente inmóviles, lo que impide que puedan fecundar el óvulo.
Tipos de necrozoospermia
Existen dos tipos de necrozoospermia:
- Parcial: cuando entre un 50% y un 80% de los espermatozoides están muertos.
- Total: cuando el 100% de los espermatozoides están muertos.
Causas de la necrozoospermia
Las razones detrás de la necrozoospermia pueden ser diversas y, en algunos casos, difíciles de determinar. Algunas de las principales causas son las siguientes:
- Infecciones en el aparato reproductor: la prostatitis, la epididimitis u otras infecciones pueden disminuir la calidad del esperma.
- Problemas en la eyaculación: trastornos como la eyaculación retrógrada pueden hacer que los espermatozoides sufran daños.
- Varicocele: la dilatación de las venas de los testículos puede aumentar la temperatura de la zona y afectar a la viabilidad espermática.
- Desequilibrios hormonales: los niveles anormales de testosterona o de otras hormonas sexuales pueden impactar negativamente en la espermatogénesis.
- Exposición a toxinas: el tabaco, el consumo frecuente de alcohol y ciertos químicos pueden causar necrozoospermia.
- Uso prolongado de ciertos medicamentos: algunos fármacos, como los empleados en la quimioterapia pueden provocar la muerte de los espermatozoides.
- Problemas inmunológicos: en algunos casos, el propio sistema inmunitario ataca a los espermatozoides.
- Factores genéticos: algunas alteraciones en los genes pueden predisponer a padecer necrozoospermia.
¿Cómo se diagnostica la necrozoospermia?
Como ya hemos avanzado, el diagnóstico de la necrozoospermia se realiza a través de un seminograma, un análisis de semen que evalúa numerosos parámetros de los espermatozoides (volumen, movilidad, morfología, vitalidad…).
Adicionalmente, y con el objetivo de confirmar el diagnóstico, se pueden hacer pruebas adicionales:
- Test de vitalidad con eosina-nigrosina: se utiliza una técnica de coloración para diferenciar los espermatozoides vivos de los muertos. Tras la tinción con eosina, los espermatozoides muertos adquieren un color rosa o rojo, mientras que los vivos mantienen su tono blanco.
- Análisis microbiológico: si se sospecha de una infección, se puede realizar un cultivo de semen.
- Evaluación hormonal: un análisis de sangre puede determinar si existen alteraciones hormonales que afecten a la producción espermática.
- Biopsia testicular: permite extraer espermatozoides directamente de los testículos para evaluar su vitalidad.
¿Existe tratamiento para la necrozoospermia?
El tratamiento de la necrozoospermia depende de su causa. Las principales opciones para tratarla son las siguientes:
- Antibióticos: si la necrozoospermia está relacionada con una infección, tratarla puede mejorar la calidad del esperma.
- Corrección de hábitos de vida: dejar de fumar, reducir el consumo de alcohol y evitar la exposición a tóxicos puede ser beneficioso.
- Cirugía: en casos de varicocele, una intervención quirúrgica puede mejorar la calidad espermática.
- Tratamiento hormonal: si hay un desequilibrio hormonal, se pueden recetar ciertos fármacos para mejorar los niveles de las hormonas sexuales.
- Cambios de medicación: si un medicamento está perjudicando la producción de espermatozoides, el médico puede valorar la posibilidad de retirar el fármaco y pautar una alternativa.
Sin embargo, si el objetivo es conseguir el embarazo, hay que tener en cuenta que en algunos casos la necrozoospermia no se puede tratar de manera eficaz, lo que hace necesario recurrir a técnicas de reproducción asistida.
¿Se puede conseguir el embarazo con necrozoospermia?
Sí, aunque dependerá del grado de la necrozoospermia y de la existencia o no de espermatozoides vivos. En casos leves, los cambios en el estilo de vida y los tratamientos médicos pueden mejorar la calidad del esperma. En otras situaciones, será necesario recurrir a técnicas especializadas de fertilidad.
Técnicas de fertilidad para hombres con necrozoospermia
Si no se puede lograr el embarazo de manera natural, existen varios tratamientos de reproducción asistida a los que se puede recurrir:
1. Fecundación in vitro con ICSI
La fecundación in vitro con inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI) permite seleccionar el espermatozoide de mayor calidad e inyectarlo directamente en el óvulo. Para esto, se pueden obtener espermatozoides a través de la eyaculación (con una muestra de semen) o mediante una biopsia testicular.
2. Fecundación in vitro con semen de donante
Si no se encuentran espermatozoides vivos en el semen ni en los testículos, la opción más efectiva es recurrir a una donación de semen. Los bancos de esperma cuentan con muestras de alta calidad, lo que aumenta las posibilidades de éxito del tratamiento de fecundación in vitro.
3. Fecundación in vitro con espermatozoides congelados
Esta técnica se puede llevar a cabo en hombres que congelaron su esperma antes de desarrollar necrozoospermia. Si el semen es de buena calidad se puede utilizar en una fecundación in vitro.
4. Tratamientos complementarios
En algunos casos, los suplementos antioxidantes o los cambios en el estilo de vida pueden ayudar a mejorar la calidad del semen y obtener mejores resultados en los tratamientos de fertilidad.
Como ves, la necrozoospermia puede ser un obstáculo para lograr el embarazo pero, afortunadamente, existen soluciones. Dependiendo de la causa y la gravedad del problema, se pueden explorar tratamientos médicos o recurrir a técnicas especializadas de reproducción asistida.
Si acabas de recibir un diagnóstico de necrozoospermia y buscas una solución, en Centro de Fertilidad contamos con especialistas en reproducción asistida que pueden ayudaros a encontrar el camino más sencillo para conseguir el embarazo. No dudes en pedir una primera consulta gratuita para evaluar tu caso y conocer las opciones disponibles.