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¿Cómo puedo conseguir un embarazo si mi pareja tiene teratozoospermia?

Conseguir un embarazo con teratozoospermia

Revisado por el Dr. Guillermo Gauthier

La teratozoospermia es una de las principales causas de esterilidad masculina, ya que repercute en la calidad de los espermatozoides del hombre. Como consecuencia, estos encuentran más dificultades para encontrarse con el óvulo y fecundarlo.

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Por todo ello, en nuestras clínicas de reproducción asistida tratamos a numerosas parejas afectadas por este problema. En este artículo vamos a profundizar en los diferentes tipos de teratozoospermia, ya que no todos afectan de la misma manera a la capacidad reproductiva.

Además, indagaremos en las causas de la alteración y te diremos cuáles son los mejores tratamientos para lograr un embarazo si tu pareja tiene teratozoospermia.

¿Qué es la teratozoospermia?

La teratozoospermia es una afección que afecta a la morfología de los espermatozoides. Se considera que un hombre padece teratozoospermia cuando un alto porcentaje de sus espermatozoides presenta defectos en su forma. Dichas alteraciones pueden estar presentes en cualquiera de sus partes (cabeza, pieza intermedia o cola).

A la hora de establecer el porcentaje concreto de espermatozoides con anomalías morfológicas, existen dos criterios ampliamente reconocidos: el de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el de Kruger.

Por una parte, la OMS establece que un hombre padece teratozoospermia cuando el 96% de sus espermatozoides tiene una forma anormal. Por otra parte, la clasificación de Kruger afirma que se puede hablar de teratozoospermia cuando el varón presenta alteraciones en más del 85% de sus espermatozoides.

Tipos de teratozoospermia

Existen tres tipos de teratozoospermia: leve, moderada y severa.

  • Teratozoospermia leve: se produce cuando el hombre presenta una morfología normal en el 14% de sus espermatozoides. Dentro de este tipo de teratozoospermia podemos distinguir la denominada teratozoospermia discreta, que ocurre cuando, además, las anomalías en la forma son leves.
  • Teratozoospermia moderada: hablamos de teratozoospermia moderada cuando el porcentaje de espermatozoides normales se sitúa entre el 9% y el 4%.
  • Teratozoospermia grave: en este tipo de teratozoospermia, la muestra de espermatozoides normales está por debajo del 4%.

Causas de la teratozoospermia

Como verás a continuación, la teratozoospermia puede estar causada por una gran variedad de factores:

  • Anomalías genéticas: pueden ser hereditarias o adquiridas.
  • Infecciones: las infecciones genitales, especialmente las de transmisión sexual, como la gonorrea o la clamidia, pueden afectar a la calidad de los espermatozoides.
  • Lesiones testiculares: las lesiones en los testículos tienden a afectar la producción de espermatozoides y causar teratozoospermia. Por ejemplo, esto ocurre con el varicocele.
  • Alteraciones hormonales: este es el caso del hipogonadismo, una anomalía que impide a los testículos producir suficientes hormonas sexuales.
  • Exposición a tóxicos: el contacto con determinados elementos, como los pesticidas o los metales pesados (plomo, mercurio, cobre…) también puede causar teratozoospermia.
  • Quimioterapia o radioterapia: en general, los tratamientos contra el cáncer afectan a la capacidad reproductiva.
  • Estilo de vida: dentro de esta causa, englobamos todos los factores relacionados con la alimentación, la falta de ejercicio físico, el estrés, el tabaco, el abuso del alcohol o las drogas. Además, el uso de ropa demasiado ajustada también puede perjudicar la calidad de los espermatozoides.

¿Cómo se diagnostica la teratozoospermia?

La teratozoospermia se diagnostica a través de un seminograma. El seminograma es una prueba muy sencilla que consiste en analizar una muestra de semen. Aunque hay seminogramas que pueden adquirirse en farmacias o en Internet, lo cierto es que resulta fundamental acudir a una clínica de fertilidad.

Esto se debe a que dichos centros cuentan con laboratorios que permiten realizar un análisis más exhaustivo de la muestra, lo que aporta mayor información sobre las características de los espermatozoides.

Por ejemplo, los seminogramas comprados en farmacias o en Internet no permiten indagar sobre el tipo de teratozoospermia (leve, moderada o severa). Sin embargo, esta información resulta fundamental para poder tratar la afección y conseguir un embarazo.

En los laboratorios de fertilidad se realiza un análisis microscópico de los espermatozoides, con el objetivo de detectar las anomalías en su morfología. Pero, además, se evalúan otros parámetros relacionados con la cantidad, la concentración o la movilidad de los espermatozoides. De esta manera, se podrá establecer si, aparte de teratozoospermia, el varón padece cualquier otra alteración que afecte a su capacidad para concebir.

¿Qué pasa si tengo teratozoospermia?

La teratozoospermia no causa complicaciones en el hombre, a excepción de las relacionadas con la fertilidad. Por tanto, la teratozoospermia solo requiere ser tratada cuando el varón desea tener hijos y no puede.

En el caso de que el hombre no pueda conseguir un embarazo natural con su pareja, será necesario recurrir a técnicas de reproducción asistida.

¿Cómo quedar embarazada si mi pareja tiene teratozoospermia?

Afortunadamente, hoy en día existen diferentes métodos para ayudar a concebir a las parejas afectadas por la teratozoospermia.

En el caso de no lograr un embarazo de manera natural, será necesario acudir a una clínica de reproducción asistida. Tras realizar un estudio de fertilidad a ambos miembros de la pareja, los especialistas determinarán cuál es el tratamiento más adecuado.

Pero, en general, podemos distinguir entre las siguientes opciones:

Inseminación artificial

Es la técnica más sencilla de todas. Está indicada cuando la mujer no presenta problemas de fertilidad y la teratozoospermia del varón es leve.

Fecundación in vitro

Es un tratamiento más complejo, al que se recurre cuando el hombre presenta una teratozoospermia moderada o severa, la feccundación in vitro. Además, permite tratar problemas en la fertilidad femenina.

Ante cualquiera de los dos tratamientos (inseminación artificial o fecundación in vitro) resulta fundamental que el hombre mejore sus hábitos de vida, lo que repercutirá en la calidad de su esperma y aumentará las posibilidades de concebir. Algunos de los hábitos que se pueden mejorar son los relacionados con la alimentación, el ejercicio físico, el estrés o el consumo de alcohol.

Donación de semen

Es una variante de la fecundación in vitro. La donación de semen es el último tratamiento al que recurrimos en nuestras clínicas de fertilidad. Esto se debe a que se lleva a cabo cuando el semen del hombre no es válido para conseguir un embarazo, lo que hace necesario acudir a un donante de esperma para que la mujer pueda quedarse embarazada.

Si bien es cierto que las técnicas de donación de gametos (óvulos y semen) generan cierto rechazo inicial, la realidad es que cada vez se realizan con mayor frecuencia. En general, los hábitos de vida y el retraso en la edad de la maternidad hacen que muchas parejas recurran a donantes para cumplir su sueño de tener una familia.

Ginecólogo y obstetra, especialista en reproducción asistida.

Guillermo Gauthier es ginecólogo del centro de fertilidad donde ejerce atendiendo a pacientes nacionales e internacionales. Es licenciado en Medicina y especialista en Ginecología y Obstetricia. Se especializó en Reproducción asistida realizando el Máster de Reproducción en el IVI/Universidad Rey Juan Carlos. 

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