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Diferencia entre esterilidad e infertilidad
Tanto la esterilidad como la infertilidad implican la incapacidad para lograr un embarazo y tener hijos. Sin embargo, entre ellos existe una sutil diferencia.
Esterilidad
Se conoce como esterilidad a la imposibilidad de lograr un embarazo tras haber mantenido durante un año relaciones sexuales regulares sin métodos anticonceptivos.
La esterilidad puede afectar tanto al hombre como a la mujer. Además, se puede clasificar en dos tipos: primaria y secundaria.
- Esterilidad primaria: la esterilidad primaria se da cuando una pareja no ha podido conseguir nunca un embarazo natural.
- Esterilidad secundaria: la esterilidad secundaria tiene lugar cuando la pareja, tras haber tenido un hijo en común, no logra otro embarazo.
Infertilidad
A diferencia de la esterilidad, la infertilidad se refiere a la incapacidad para conseguir que el embarazo llegue a término. Es decir, aunque la gestación se produce, a lo largo de ella aparecen problemas que imposibilitan su evolución.
Por ejemplo, la infertilidad puede provocar fallos de implantación por parte del embrión y abortos recurrentes.
Al igual que en el punto anterior, la infertilidad se puede desglosar en dos tipos: primaria y secundaria.
- Infertilidad primaria: la infertilidad primaria se da cuando la pareja no ha conseguido nunca un embarazo que llegara a término.
- Infertilidad secundaria: la infertilidad secundaria se produce cuando, tras haber tenido algún hijo, la pareja no consigue que un nuevo embarazo llegue a término.
Causas de esterilidad e infertilidad en la mujer
Las principales causas de que una mujer sea estéril o infértil son las siguientes:
- Síndrome de ovario poliquístico
- Enfermedades de transmisión sexual (ETs): gonorrea y clamidia, especialmente
- Baja reserva ovárica
- Edad avanzada (más de 35 años)
- Malformaciones del útero. Por ejemplo, el útero septo.
- Anovulación (imposibilidad de los ovarios de liberar óvulos)
- Amenorrea (ausencia de menstruación)
- Endometriosis (crecimiento de tejido endometrial fuera del útero)
- Obstrucciones en las trompas de Falopio
- Otras enfermedades. Por ejemplo, la diabetes o el hipotiroidismo
- Causas relacionadas con el estilo de vida: estrés, obesidad, tabaco, alcohol, drogas, etc.
Causas de esterilidad e infertilidad en el hombre
Las principales causas de que un hombre sea estéril o infértil son las siguientes:
- Oligospermia (bajo número de espermatozoides en el semen)
- Azoospermia (ausencia total de espermatozoides)
- Baja calidad del semen. Por ejemplo, los espermatozoides tienen escasa movilidad, existen alteraciones en su morfología, etc.
- Problemas de erección, lo que dificulta completar la relación sexual.
- Orquitis (inflamación de los testículos)
- Varicocele (dilatación de las venas que se encuentran en los testículos)
- Eyaculación retrógrada (el semen ingresa a la vejiga del hombre en vez de salir del pene)
- Problemas de próstata
- Enfermedades de transmisión sexual
- Otras enfermedades. Por ejemplo, la diabetes o el hipotiroidismo
- Causas relacionadas con el estilo de vida: estrés, obesidad, tabaco, alcohol, drogas, etc..
Tratamientos para la esterilidad y la infertilidad
En caso de que una pareja experimente dificultades para lograr un embarazo natural, podrá acudir a una clínica de fertilidad para someterse a una serie de exámenes.
Tras ellos, los especialistas aconsejarán cuál es el tratamiento más adecuado para conseguir un embarazo que llegue a término.
Las principales técnicas de reproducción asistida son las siguientes:
Coito programado
El coito dirigido es la técnica más natural que existe. Consiste en controlar el ciclo menstrual de la mujer con una serie de ecografías y sincronizar su momento de máxima fertilidad con las relaciones sexuales.
Dada su sencillez, el coito programado está indicado ante problemas de esterilidad e infertilidad de carácter muy leve.
Una de ellas se podría considerar más “natural” consecuentemente, la otra vía se consideraría como un método de reproducción más artificial.
Inseminación artificial
La inseminación artificial consiste en introducir el semen directamente en el útero de la mujer. Este procedimiento se lleva a cabo mediante una intervención muy sencilla en el momento de la ovulación.
En función de en qué miembro de la pareja se encuentre el problema de esterilidad o infertilidad, el semen puede ser del hombre o de un donante anónimo. Es decir, esto último se hace cuando el hombre es estéril o infértil.
Fecundación in vitro (FIV)
La fecundación in vitro es la técnica más avanzada de todas. Y, por tanto, la que permite tratar problemas de esterilidad e infertilidad de mayor complejidad.
La fecundación in vitro consiste en extraer los óvulos de la mujer y fecundarlos en el laboratorio con el espermatozoide del hombre. Posteriormente, el embrión resultante se transfiere al útero.
A su vez, este tratamiento permite una serie de combinaciones. Y es que, ofrece diferentes soluciones en función de si los problemas para tener hijos tienen una causa masculina o femenina.
Si el origen está en la mujer, la fecundación in vitro permite recurrir a la donación de óvulos. Por su parte, si nos encontramos ante una causa masculina, será posible acudir a un donante se semen. Y, si tanto el hombre como la mujer tienen problemas para tener hijos, será posible realizar una fecundación in vitro con doble donación.
Dicho todo lo anterior, esperamos haberte ayudado a conocer la diferencia entre esterilidad e infertilidad. Si crees que alguno de estos problemas está afectando a tu capacidad para tener hijos, los especialistas de nuestras clínicas de reproducción asistida estarán encantados de despejar tus dudas.